Patio Taller Macondo se escribe con M de Mujer

Escrito por Liliana Vanegas Romero @LiliVanegasR

Hace un poco más de cuatro décadas en Astrea, municipio del centro del Cesar, nació una mujer que profesa ser de corazón vallenato y bumangués. Ella es egresada del emblemático colegio Prudencia Daza de Valledupar, con estudios superiores de Trabajo Social en la universidad Industrial de Santander, UIS de Bucaramanga, orgullosa madre cabeza de hogar que no sólo vela por el cuidado de su pequeña hija Isabela sino por el de sus padres, a quienes atiende con esmero y amor cada día, es una entusiasta facilitadora comunitaria, ambientalista, animalista, amante y crítica del arte, en especial profesa un talento natural para las artes visuales, la música y la fotografía, su nombre es Lourdes Virginia Narváez Mendinueta, una mujer aguerrida y emprendedora que forja día a día su visión de emprendimiento desde su hogar en un particular espacio al que ella ha bautizado PATIO TALLER MACONDO, lugar que con dedicación transforma en sus tiempos y maneras día a día.

¿Pero en qué consiste este emprendimiento llamado “Patio Taller Macondo”? PTM nace un mes de mayo de 2017, luego de que sus gestoras, Lourdes V. Narváez M. y Yarime Lobo Baute, realizaran por primera vez un trabajo en la técnica de Trencadís en la fachada del Colegio Fisher Kids sede campestre, en la vía que conduce al corregimiento de Río Seco. La arquitecta y artista Yarime Lobo atendiendo la invitación que le extendiera la fundadora y directora de este plantel educativo, asumió el reto de interpretar el anhelo de esta visionaria mujer llamada Gloria Oliveros y se dio a la tarea de realizar los diseños y ejecución de esta obra de más de 80 metros cuadrados, a la cual dio participación a jóvenes de la talla de artistas como Diego Rueda, Yull Nuñez, entre otros y mujeres como las artistas Orieta Fajardo y Lourdes Narvaéz, siendo esta ultima la más entusiasta que una vez finalizado el trabajo en el Colegio quiso replicar en el patio de su hogar la técnica aprendida en la obra del Colegio que consiste en la instalación de pequeños trozos de baldosas, adheridas a la pared con una masilla y recubierta con pasta de colores, configurando obras de colorido, belleza y durabilidad en el tiempo. Fue así que la arquitecta Yarime Lobo motivada por la visión donó varios diseños al patio de esta vivienda que colinda con el Coliseo Cubierto y se encuentra enclavada en el barrio Garupal, aportó materiales como baldosas de todos los colores, pegantes, mallas y todo lo que se requiere para la realización de una obra de este tipo, además de facilitar herramientas para llevar a cabo este laboratorio artístico y de formación que apunta a llegarle a todo aquel que desee aprender las técnicas de mosaico y trencadís.

¿De qué se compone Patio Taller Macondo y a dónde aspira a llegar? PTM se ubica en el patio de una casa tradicional del barrio Garupal Etapa 2. Consta de cinco (5) paredes de las cuales ya han sido intervenidas tres (3), teniendo como meta que al finalizar este año sean intervenidas las dos (2) que faltan. Cuenta con todos los materiales y herramientas necesarias para realizar la labor de formación y perfeccionamiento en las técnicas del mosaico y trencadís.
Este emprendimiento aspira a crecer y consolidarse como un espacio de formación en la técnica del mosaico y trencadís para el público en general, pero especialmente para las mujeres cabeza de hogar, como alternativa y estilo de vida que les garantice entradas económicas desde el seno de sus hogares. Lourdes Virginia es una convencida de que capacitando a las mujeres se pueden consolidar una fuerza hacedora que sume un cumulo de manos femeninas que harán posible aspirar a participar en los proyectos que en este arte la ciudad requiera. Es con la estrategia de unificar las Manos de Mujeres en una causa común que se puede llenar de colores almáticos los espacios de este territorio macondiano inspirador de cuentos, música y leyendas, se pueden fortalecer redes de trabajo solidario para el género femenino en diversas actividades económicas y PTM le apuesta a ser un escenario importante para fortalecer este anhelo común.
¿A qué le apunta este emprendimiento y cómo lo ve en cinco años? Ha sido factor decisivo y de mucha motivación la acogida de esta iniciativa de emprendimiento el apoyo en la distancia de mosaiquistas reconocidas(os) en todo el país, mujeres como Aura Posada desde Puerto Colombia (Atlántico), Aura Merino desde Puerto Berrio (Antioquía), Sebastián Loaiza desde Manizales (Caldas), Jorge Muñoz desde Villavicencio (Meta), Angélica Gutiérrez desde Medellín (Antioquia), Ángela Rengifo desde Cali (Valle del Cauca), quienes enviaron sus obras (libélulas, pájaros, mariposas, girasoles, entre otras figuras) para que fuesen instaladas en las paredes de PTM. Hubo muchos más aportes, en asesorías de parte de otros artistas a nivel nacional y llegaron valiosas herramientas provenientes del exterior como las enviadas por Érika Figueroa con su emprendimiento de Mosaik Art Studio desde los Estados Unidos. Han sido espaldarazos determinantes que permiten aspirar a hacer de PTM un epicentro de actividades artísticas y una propuesta económica sólida para mujeres cabeza de hogar con reconocimiento y proyección local, nacional y por qué no, internacional. Tiempo al tiempo, paso a paso.

En marzo de 2018 recibió una capacitación en corte perfecto en Bogotá con el maestro internacional Luciano Torres, de Brasil, aprendizaje que la fortaleció en esa búsqueda de brindar en lo local capacitaciones que den herramientas de conocimiento en las técnicas mencionadas y llevarlas a ejecución en la elaboración de productos decorados como macetas, adorno de paredes interiores o fachadas de casas o edificios, jardines y como lo he mencionado antes, participar en los proyectos de decoración urbana en la ciudad y municipios aledaños, puntualizo Lourdes Narváez.
Un valor agregado del espacio, es que desea convertirse en taller para el aprendizaje o reforzamiento de actividades escolares para niños y niñas como pintura, lectura, escritura, y otras modalidades artísticas, agregó esta visionaria mujer.

El Joven arhuaco Dinael Torres, modelo de inspiración en esta obra