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Energía eléctrica limpia: un sueño que Comfacesar cumplió a 528 familias de la zona rural de La Paz
En pleno siglo XXI en Colombia, una buena porción del área rural padece del suministro de energía eléctrica debido a deficiencias o inexistencia de redes de conexión, su ubicación o las condiciones de algunas zonas. En el Cesar, la situación no es ajena y miles de familias de esas zonas apartadas utilizan otro tipo de soluciones como plantas de generación por diésel o gasolina, lo cual además de costoso, es nocivo para el medio ambiente.
En ese sentido, son pocas las empresas que han puesto la mirada en esa problemática e iniciar programas y/o proyectos que apunten a la generación de energías limpias, que además de disminuir su huella ambiental, promuevan la sostenibilidad del planeta.
Una de las pioneras en el tema ha sido La Caja de Compensación Familiar del Cesar, Comfacesar, la cual desde sus propias operaciones inició la instalación de páneles solares entendiendo que la energía solar fotovoltaica se ha convertido en un pilar fundamental en la transición hacia una economía más limpia y sostenible.
En sus sedes Centro Integral de Servicios de La 14 y el Colegio Comfacesar “Rodolfo Campo Soto”, instaló 120 y 130 módulos, respectivamente, los cuales generan un ahorro de hasta el 46% del consumo de energía eléctrica convencional y que en términos de sostenibilidad ambiental del planeta, son un aporte para evitar la tala de más 1896 árboles que son uno de los principales sumideros de gases de efecto invernaderos (GEI) o también se puede interpretar como la NO emisión de 47.716 Kg de Co2 equivalentes a la atmósfera, ya que es el principal agente causante del temido cambio climático.
Este mismo modelo fue volcado a la ejecución de proyectos sociales a favor de las comunidades más vulnerables y es así como la Caja, firmó un convenio con la Alcaldía de La Paz, para llevar este tipo de energías a 15 veredas de su zona corregimental, en donde ya se instalaron 528 sistemas de energía fotovoltaica. Estos, hoy se traducen en bienestar para más de 1500 personas, que por años vivieron en la oscuridad, debido a los servicios de energía eléctrica no llegan a esos territorios.
María Quintero, una de las beneficiarias de los paneles en la vereda La Vega, vivió por más de tres años a oscuras y soportando el asedio constante de las serpientes.
“Esto es una bendición que Dios nos ha mandado, viví muchos años a oscuras y eso era culebra por todas partes, por eso tengo un poco de gatos para que las mataran. Yo soy adicta a la costura y a lo que me instalaron la luz, lo primero que me traje fueron dos máquinas y ahora además de vivir más cómoda puedo hacer arreglos de ropa a mejor precio que en el pueblo porque no debo pagar esos recibos de energía costosos y también puedo usar mi abaniquito y mi televisor”, expresó la mujer.
Al igual que María, Consuelo Pérez de 40 años, tenía deshabitado su terreno en la zona porque su casa estaba totalmente a oscuras y sentía temor por sus dos hijos. “Sentimos un alivio, una alegría muy inmensa, ojalá que otras personas que están viviendo acá pudieran tener también una planta solar”, aseguró la beneficiaria que ahora puede gozar de usar electrodomésticos básicos como televisor, abanico, nevera, radio y obtener carga para el teléfono celular.
A cada beneficiario se les instalaron dos páneles solares de 480 vatios cada uno, que tiene más de 5 años de utilidad. Estas familias que vivían en la oscuridad ahora podrán usar bombillos, licuadoras y otros aparatos eléctricos de bajo consumo.
El Director Administrativo de Comfacesar, Frank Montero, manifestó su satisfacción por ver materializados los resultados de esta importante iniciativa: “Una de las cosas positivas es que en esta zona nunca habían tenido energía eléctrica y para nosotros es gratificante haber llegado a estas zonas apartadas de las cabeceras municipales y además haber generado empleo con la instalación de los sistemas”.
Destacó que este tipo de iniciativas hacen parte de las apuestas que lidera la Caja, por generar impacto social sostenible en la región, a través de proyectos y alianzas estratégicas que beneficien a las comunidades.
