Download WordPress Themes, Happy Birthday Wishes
Macondo Naranja

Macondo, la tierra de Germán el hombre

Escrito por Yarime Lobo Baute @YarimeLobo

Es un día 25, de un mes de Mayo y los pensamientos humanos como una especie de álbum de fotografías cuyas hojas pasas hacia adelante, o hacia atrás dependiendo de las circunstancias y del único tiempo que dispones: El aquí y el ahora.

Boceto de la Obra Valledupar, la tierra que acogió a Germán, el hombre
Boceto de la Obra Valledupar, la tierra que acogió a Germán, el hombre

Hay hojas que más que contener fotos parecieran hojas de piedras talladas con historias que se pintan con los vibrantes colores que brinda la inconmensurable naturaleza de Macondo, imposible evitar la presencia de aquel personaje de apariencia alargada y ligera que se esculpe como escultura en la esencia de su apellido: Piedrahita, cuyo nombre de origen guerrero es una alegoría que traspasa las manecillas del reloj donde la defensa y resistencia es la consigna misma de la vida y obra de ese hombre de nombre Germán de apellido Piedrahita, que naciera un 25 del mes de Mayo en el año 1950.

Germán y Yarime en un aula de clase del Colegio La Sagrada Familia (1988)
Germán y Yarime en un aula de clase del Colegio La Sagrada Familia (1988)

Pensar en él me lleva por la carrilera donde circula el tren de los tiempos para posarme en la estación de la década de los ochenta, la locomotora de recuerdo se detiene en esa estación para dar inicio a un recorrido que finaliza en la década donde los ochenta y noventa se vuelven infinitos. Parece haber pasado hace unos instantes cuando estaba allí, en el segundo piso de una edificación cuya planta arquitectónica se asemejaba a la U, esa forma no era otra cosa que largos corredores que contenían salones repletos de mujercitas que no llegaban a los años de la primavera, trascurría la media de esa década ochentera y aquel personaje, cual Quijote, nos hacía salir del salón para sentarnos en un punto del largo corredor y allí desde el silencio nos inducia a observar lo que la rutina diaria nos llevaba simplemente a mirar, ese hombre sacudía los sentidos para que observáramos el fondo de aquel corredor y en una hoja de papel a través de líneas sujetadas de un punto retratáramos lo que el ojo ya no veía, sino sentía.

Germán y Yarime juntos en actividades de defensa y preservación del Río Guatapuri
Germán y Yarime juntos en actividades de defensa y preservación del Río Guatapuri

Salir de las cuatro paredes de aquel salón que se sumaba junto a otros a esa gran edificación donde se impartía conocimiento y la consigna de que lo sagrado es la familia, era toparse con esa montaña que llamaban “cerro” y que parecía estar casado con la única industria que ha habido por estas tierras: El Cerro de Cicolac.

En la foto De izquierda a derecha Tomas Darío Gutiérrez, Yarime Lobo, Germán Piedrahita, Gustavo Gutiérrez
En la foto De izquierda a derecha Tomas Darío Gutiérrez, Yarime Lobo, Germán Piedrahita, Gustavo Gutiérrez

Obedecer la directriz de Germán equivalía a un disfrute que no se tenía en otras áreas del conocimiento, era el equivalente a zambullirse en el mundo del ver con los ojos de alma y cada clase con él era la oportunidad de apreciar los espacios donde transcurrían los años de niñez a adolescencia desde los puntos de fuga, que una vez dominados pasaron de ser un simple punto a ser perspectivas donde el Cerro casado cambiaba de tonalidades según la temporada en que estuviéramos, unas veces tono trigo, otras esperanza y otras radiante con unos amarillos mágicos.

Germán Piedrahita, Yarime Lobo y Marion Lecardonell Directora de la Alianza Francesa
Germán Piedrahita, Yarime Lobo y Marion Lecardonell Directora de la Alianza Francesa

Esos años maravillosos de los ochenta pronto se fueron acercando a los noventa y con él también los cambios, aquel espacio orientado por mujeres vestidas de blanco y llamadas “hermanas” de apellido “Terciarias Capuchinas” en aquel mes de noviembre de 1989 se vistió de Gala y el vestido a cuadros que usamos se adornó con una cinta azul que contrastaba con la impecable camisa manga larga, a mi lado estaba Germán, quien me había secundado en la hazaña de crear y dejar como legado un periódico escolar que titulamos Faz Colegial, allí trazamos líneas que se hicieron caricaturas y letras que contenían los sentimientos propios de la despedida, eran cuatro hojas de lado y lado escritas con una maquina mágica de letras cursivas en las que se atrevieron a escribir Ana María Torres Ochoa, quien después se hiciera abogada, Leonor Caamaño, hoy médica, Patricia Hernández Villazón a quien no volví a ver pero su radiante copete blanco persiste en mi memoria, Ana Maria Baute Mestre, como jefa de redacción, quien después se hiciera periodista, Germán como director y columnista aportando su columna titulada “Las extrañaré a todas” y quien aquí escribe la historia contenida en esa página del álbum de recuerdos. Repartimos ese día más de mil ejemplares con los ojos brillantes por la alegría y nostalgia. Ese día cantamos a coro una canción célebre de un reconocido grupo de esos días llamado Menudo “El ayer hoy vuelve a mí, lleno de tantos recuerdos, que se van dejando atrás un pasado muy feliz”.

Obra: Valledupar, la tierra de Germán el Hombre Ubicada en la entrada de la Casa de la Cultura
Obra: Valledupar, la tierra de Germán el Hombre
Ubicada en la entrada de la Casa de la Cultura

Los ochenta se fueron como agua entre los dedos y en un abrir y cerrar de ojos me hallaba en los noventa y esta vez en la capital, estudiando una carrera donde los puntos de fuga y las perspectivas se convirtieron en mis armas de combate, era lo que hoy equivale a hacer Render en la Arquitectura. Mi mundo se llenó de trazos y más trazos para dar paso a planos, cortes, fachadas y la perspectiva como ilusión óptica para adentrar al espectador en los espacios de esos planos que se hacían tridimensionales a través de los puntos y las fugaz de los mismos para un lado y para otro. Mi alegría no tenía límites y el compartir la ampliación de ese conocimiento con Germán era el plan de fines de semana a través de llamadas telefónicas porque, en ese entonces, el internet no era la herramienta de comunicación.

Portada del periódico Faz Colegial  Foto Yarime Lobo
Portada del periódico Faz Colegial Foto Yarime Lobo

En una de esas llamadas, me cuenta Germán que iba a hacer de la Leyenda de Francisco el Hombre un gigante mural donde todos los símbolos de la Cultura Vallenata estuviesen condensados e integrados en una geometría que se pasearía entre el cubismo y la impronta propia de su perspectiva. Eran los tiempos donde hacer de Valledupar una sorpresa en el caribe implicaba impregnarle colorido a la plaza cuyo corte colonial ya comenzaba a regionalizarse con la intrépida presencia de la tarima paralela al palo de mango que hacia honor a la leyenda de Francisco.

Corrieron los noventa para besar el punto cero y en todo ese correr de tiempo allí estaba ese hombre de nombre Germán, nos encontrábamos siempre porque así es Valledupar, una vez la ves con los ojos del alma no te puedes desprender, nuestros puntos de fuga se convirtieron en criterios, de esos criterios salían visiones y propuestas de construcción del tejido social. Pronto el punto cero comenzó a acercarse al 10, era el 2008 cuando Germán me extiende la invitación para participar en una exposición de Arte tipo concurso en la Casa de la Cultura, en la que en aquel entonces el era el coordinador. Mi susto fue terrible, pero acepté y me presenté con un diminuto cuadro donde el punto de fuga permitía apreciar la perspectiva de la trama urbana de Valledupar. Lejos estaba de imaginar que participar en esa exposición trajera consigo la exhortación de Germán a no parar de pintar. Desde aquel entonces hasta el presente lo sigo haciendo desde las formas y maneras como me enseñó: Observando con los ojos del alma.

El 2010 pronto se volvió 2011, y con él, Germán y yo juntos otra vez ahora desde el Diseño Gráfico, la vida nos ponía el reto de proyectar el programa desde la Universidad del Área Andina y nuestro plan estaba más que claro: llenaríamos de murales de colores a Valledupar. Pero Germán cada día se hacía más ligero y pronto el 2011 se hizo 2012 y con el peso ligero de las plumas de un ave Germán se elevó en perspectiva al infinito cielo. Mil lágrimas cayeron y la impotencia propia del humano me hizo recordar la gran hazaña de Germán al retratar aquella batalla de Francisco El hombre consigo mismo, pues finalmente la envidia sentida por ese “diablo” de la leyenda no era otra cosa que la batalla que libra internamente el Ser humano en su interior y que la única manera de vencerla es con esos talentos con los que vienes dotado desde el vientre de tu madre… Entonces, mis lágrimas cesaron y comprendí que somos eso: la imagen y semejanza de ese Dios de todos, que no es casual que estemos en un territorio de nombre Valledupar y de apellidos Tierra de Dioses. Aquí venimos a servir y entregar nuestros talentos a manos llenas, como lo hizo Germán, el Hombre.

31 comentarios

  1. Todos estos relatos me llevan de nuevo a mi viejo Valledupar! A esa plaza con su piso rojo con sus casitas blancas !! Toda ella es mi tierra ! Bendiciones amiga !! Escribe más y más !!

  2. Yari tu tienes la especialidad de transportar me en mente y espíritu a Valledupar. Me encanta leer tus escritos. Un abrazo.

  3. Una prosa delicada, con contenido profundo, una verdadera reminiscencias, con perspectiva de lo que fué la parábola vital de Piedrahita, me tocó con él unas facetas que no tocas tal ves no la conociste o porque resaltas su principal actividad el de jugador de Voleibol y la ideología alternativa

  4. Yarime, gracias por cada columna que compartes. Son inspiradoras, llenas recuerdos, de reflexión, de vida.
    🌸 El aquí y el ahora a veces está acompañado de recuerdos; recuerdos que nos permiten aprender y descubrir quiénes somos gracias al camino recorrido.

    ❤ Mi corazón está a su servicio.

  5. Excelente 👍🏼
    Admiro tu labor de transmitir a través de tu pluma y pincel toda la magia que encierran esos seres maravillosos que se encuentran a granel en este territorio que llamas Macondo.
    No pares de hacerlo.

  6. Que limpio y emotivo escrito Yarime, lleno de aprendizaje, Gratitud y agradecimientos con un gran ser como fue Germán, pero a la vez nos regalas una invaluable enseñanza, por nuestra complicidad ante tanta Indiferencia que Inmerecidamente le regalamos a nuestra ciudad.

  7. Muchas gracias por.Ese hermoso semblante que dibujas del maestro, mentor, profesor y artista. Para mí era todo eso, mi tío era un ejemplo a seguir y aunque hayan mancillado su recuerdo siempre vivirá en todos aquellos que tuvimos el honor de compartir con él. Lo importante Es no dejar que muera su legado, el que vivirá con todos sus estudiantes.

  8. Gran reseña de ese gran Maestro que los que tuvimos la oportunidad de ser sus alumnas nos hizo comprender que a través del arte te puedes comunicar y hacer historia. El hombre es el retrato de esa fotografía que plasmas a través de los recuerdos. Siempre vivirá y así borren los retratos jamás el recuerdo y enseñanza. Gracias a ese gran Maestro. Y aquellos que quieren borrar la historia no se puede por lo que ya es parte de la historia de esta tierra de dioses Valle del Cacique Upar.

  9. Yari Un Maravilloso relato de Años llenos de recuerdos del Maestro Germán Piedrahita. Hoy de un brochazo borrar Su Obra Más representativa. Pero Su recuerdo queda en cada Una de Las Personas que contamos con la dicha de conocerlo. Sigue Yari Pasando en Pinturas y Letras El sentir del Pueblo Vallenato. Felicitaciones.

  10. Cuando uno leé un artículo cómo este, es imposible no llorar. Gracias Yarime Lobo Baute hoy tocaste las fibras de mi corazón y me recordaste lo valioso de conocer un Maestro como lo Fue Germán

  11. Muchacha!!! Como me encanta tu prosa…. Realismo mágico… Con el poder de transportar en el espacio y tiempo!!!! Una novela tuya sería espectacular!!!

  12. Felicito tu manera de escribir y poder llevarme como lectora de tu columna a comprender la existencia de un ser humano como el maestro German Piedrahita.

  13. Yari. Me dejas anonadada de ver como fluyen tan nítidamente esos recuerdos juveniles. En verdad que eres un ser lleno de muchas cosas de un valor, incalculable en el arte. Eres polifacética. Quise en un momento dado, orientarte en el periodismo cuando contribuí a que hicieras el periódiquito estudiantil, muy bellos recuerdos, me llena de orgullo leerte y más aún cuando logras transmitir y despertsr sentimientos y admiración. Mi reconocimiento total.

  14. Gracias Yarime, tu afecto y admiración por el maestro, ( mi hermano querido) la apreciación por su trabajo y el respeto por su conocimiento y calidad humanas, reconfortan mi alma cuando su recuerdo me asalta. Aún pienso que Valledupar está en mora de hacerle un reconocimiento y honra a su memoria y su legado. Alguien de allá propuso un busto en bellas artes oh en la casa de la cultura, no recuerdo quien fué pero si espero verlo. Abrazos querida Yarime Lobo, aprecio lo que haces.

  15. Hermosas palabras recordando a Germán. no es casualidad que el creador muy complacido, depositara sus talentos a cada uno y pusiera su toque magistral en cada alma. Que tu voz llegue al infinito por todos los artistas de la tierra y en Colombia no se atropelle más la identidad raizal de cada región.Gracias por no olvidarlo ni a él como persona ni a su obra plasmada en el patrimonio artístico de Valledupar.

  16. Están dejando morir una Valledupar de casitas de bahareque, casas coloniales y su bello entorno Una calle q pintaron de colores q le quita la elegancia su impotencia q siempre ha tenido la plaza Alfonso López No todo puede ser copiado de otro dptos tenemos que tener identidad propia, querer y respetar lo nuestro sentido de pertenencia le falta a este pueblo. Ahora lo peor comenzó asesinando la obra de German y lo dejarán en el olvido y no habrá justicia como todo lo q sucede en este pueblo. Triste ver cómo olvidan al viejo Valledupar. Te felicitó x tan excelente columna

  17. Yari, Germán Piedrahita también fue mi profesor de artística de 6to a 9no en 10 y 11 fue mi rector, y usamos la revista que tu nombras en 8 creo yo. Yo le decía el viejo loco y hasta se dejaba peinar y hacer moñitos, nos contaba muchas historias del viejo Valledupar.

  18. Me gusta eso q dices Germán el hombre ligero…así es…sin equipaje, sin vanidades, sin prejuicios sociales..ligero como su figura.. sólo lo acompañaba las ganas de hacer un homenaje a la vida y el deseo de q sus pupilas se encontraran con su yo, con los talentos con los q Dios las adornó y q no veían..Dios lo tenga en su Gloria

  19. Yari, que gran artículo, quienes tuvimos oportunidad de conocer a Germán sabemos el gran ser humano que fue, lo sensible que mostró ser a través del arte y todo el esfuerzo que le puso en vida por exaltar la cultura Vallenata y otras disciplinas como el teatro, la música, la comunicación. Que bellas anécdotas nos cuentas nos recuerdan el profesor interesado en transmitirnos a todos la importancia del arte universal y regional, es una manera de recordarlo y homenajearlo al mismo tiempo, gracias .

  20. Le conocí a el, personalmente tuve con el varios encuentros, yo le admiraba muchísimo , muchísimo a Germán, la verdad es que vi un hombre tan sencillo, lo plasmaste muy bien en tu escrito, su sencillez, su humildad, pero también su capacidad profesional, artística, ejecutora de sus pensamientos, creativo, era un hombre muy completo en el mundo de las artes y la ciencia, aporto bastante a esta tierra no solamente con el mural que hizo en la Alcaldía, sus aportes trascienden el mural.

  21. Gracias Yarime, gracias. Esas líneas me transportaron y revivieron tantos momentos con un gran maestro como Germán que también marcó mi vida para siempre. Hasta sus últimos días me animó a no darme nunca por vencida…..grande Germán Piedrahita, grande!!!!

  22. Magistral, Yarime. Esa semblanza de Germán enriquece su imagen y rescata en buena hora su nombre como baluarte de la pintura y del arte vallenato. Felicitaciones. Tus escritos me gustan porque además de mantener la idea que motiva tu misiva, vas dejando rastros de esa hermosa historia de Valledupar que todos quisiéramos perpetuar en nuestra memoria.

  23. “Pero Germán cada día se hacía más ligero y pronto el 2011 se hizo 2012 y con el peso ligero de las plumas de un ave Germán se elevó en perspectiva al infinito cielo. Mil lágrimas cayeron y la impotencia propia del humano me hizo recordar la gran hazaña de Germán al retratar aquella batalla de Francisco El hombre consigo mismo, pues finalmente la envidia sentida por ese “diablo” de la leyenda no era otra cosa que la batalla que libra internamente el Ser humano en su interior y que la única manera de vencerla es con esos talentos con los que vienes dotado desde el vientre de tu madre… Entonces, mis lágrimas cesaron y comprendí que somos eso: la imagen y semejanza de ese Dios de todos, que no es casual que estemos en un territorio de nombre Valledupar y de apellidos Tierra de Dioses. Aquí venimos a servir y entregar nuestros talentos a manos llenas, como lo hizo Germán, el Hombre”. De Yarime Lobo Baute Y con lágrimas, como suele ser cuando algo me llega al alma. Sólo Eso.

  24. Cuando las expresiones son sinceras y vienen de lo mas profundo del sentimiento no necesitan patrones para que se conviertan de la mejor calidad e indiscutible aceptación. Así se escribe con la fluidez de un alma sana

  25. La vida es un instante que se te van cómo agua dentro de los dedos. De la vida sólo te quedan suspiros de las añoranzas del ayer, bañado en la incógnita del hoy y en el cimientos de un mañana incierto. !.La vida es un baile de Carnaval en un Macondo de Mariposas Arcos Iris, dónde prima los colores del universo infinito.!. !.Lo bueno del fandango no es ir al baile, sino saberlo Danzar sin pisar a nadie y cansarse en la Primera melodía de la vida.!. Maflye.

  26. Tus palabras escritas vienen de lo mas profundo de tu ser. Estos hechos mas allá de la polémica generan un llamado a la reflexión. Las creencias e idiosincrasia de los pueblos permanecen en la memoria de quienes seguimos en este mundo construyendo y entregando nuestro ser a esta tierra viva que gime cuando ve partir a aquellos que han hecho parte de una sociedad que ya ni se en que sentido crece cuando se lastima los sentimientos morales y éticos de las personas sin importar lo que genere en los otros . Me duele el alma al recordar.

¿Y tú, qué opinas? Comenta

Close