“No tengo tiempo”: Alicja Kwade

Escrito por Cristina Díaz

“Es algo trágico ser un ser humano porque estamos tratando de entender el mundo, pero en realidad no hay posibilidad.

Estamos construyendo sistemas, estructuras políticas o religiones para que esto sea factible y lo más fácil posible para sobrevivir en él. En realidad, es un poco absurdo”. Alicja Kwade

Empezamos noviembre con nuestra artista invitada Alicja Kwade, esta semana estuvimos con EXPRESIÓN NARANJA  en Nueva York, y pensamos en Valledupar, la tierra de nuestra inspiración, caímos en la tentación de traer esta artista relevante, quien refleja su afinidad por la filosofía y la ciencia.

Ella estudia a Marx y Kant, y lee física cuántica en lugar de ficción. La curadora jefe del museo Hirshhorn, Stéphane Aquin, la describe como “una historiadora aficionada de la ciencia”. Las curiosidades de Kwade se reflejan en su trabajo, que tiende a plantear preguntas difíciles sobre nuestra relación con los objetos y el universo, al tiempo que crea un espacio para que el espectador reflexione la respuesta.

Hirshhorn Museum and Sculpture Garden,

© Alicja Kwade,

courtesy 303 Gallery,

New York. Photo by Leigh Vogel

Las obras mixtas manipulan las percepciones mentales y las experiencias físicas de cómo el cuerpo habita el espacio y el tiempo. Kwade con frecuencia usa duplicación imperfecta, imágenes especulares y repetición en su práctica.

Alicja Kwade

TrialTurn
2019
Stainless steel, bricks
90 1/2 x 177 1/8 x 169 1/4 inches (230 x 450 x 430 cm)

Photo: Todora Photography LLC

El trabajo de Alicja Kwade (Katowice, 1979) gira en torno a cuestionamientos sobre cómo percibimos la realidad, nos invita a traspasar, escuchar y observar el espacio-tiempo, sobre mundos paralelos e infinitas posibilidades, debemos explorar lo que es real y lo que no. Combina la mente de una ingeniera precisa y de una artista. El tiempo le obsesiona: quiere medirlo, atraparlo y transmutarlo en un objeto físico.

Esta obra a continuación está expuesta en el techo del Museo Metropolitano de Nueva York. Invitada a exponer, la artista alemana-polaca Alicja Kwade pone en juego los rascacielos del horizonte con las esferas de su instalación, arrastrando al visitante a un vértigo de relatividad.

Alicja Kwade’s “ParaPivot,”

on view until Oct. 27 at the Iris and B. Gerald Cantor Roof Garden

at the Metropolitan Museum of Art.Credit…

Emily Andrews

for

The New York Times

Es fácil que en un momento u otro del día digamos la frase, “no tengo tiempo”, o que nos estresemos pensando cuantas horas más debería tener un reloj para sentirnos mejor. Si no estás en una isla paradisíaca o en la cima de una montaña, es difícil no actuar como un adicto a la sustancia más resbaladiza del mundo: el tiempo que se nos cuela de las manos y que nos roban a cada segundo. Estas son palabras que ella misma ha explorado en diferentes entrevistas y sus exposiciones.

Berlin-based artist Alicja Kwade posa con su escultura, 

ParaPivotel techo del the Metropolitan Museum of Art.

Photo: Johannes Eisele/AFP/Getty Images.

Tiempo, espacio y astronomía conforman la tríada de sus principales intereses. Lo hace con esculturas e instalaciones de materiales diversos, en un diálogo entre elementos pesados y ligeros, jugando con el sonido y la luz. Su obra es una especie de sinfonía interpretada por el sonido de los latidos del corazón de la misma artista y el tictac de un reloj. Sus obras contienen un análisis con una mirada crítica de las convenciones sociales y sistemas de creencias profundamente arraigados como las leyes de la física y aspectos de la naturaleza como podrían ser el tiempo, el espacio o la luz.

Su trabajo destaca por combinar una extensiva investigación científica y artística con un lenguaje escultórico formal pulcro y con un sutil sentido del humor que nos induce a reflexionar. Gracias a todos nuestros lectores ya sumamos más de 1.000.000 de visitas, esperamos sus sugerencias para llevarles las ciudades del mundo, el arte y la diversidad del arte contemporáneo.