A veces, creo con todo mi ser que necesito ayuda profesional. Por todo lo que me pasa, pero soy tan terco que me rehúso a aceptar dicha propuesta. Tengo varios nudos en la garganta, siento un peso terrible en mi espalda y me cuesta respirar, en ocasiones, pasan por mi mente pensamientos que aquí no puedo describir, sería una deshonra para mí y para ustedes mis lectores.
Sigo teniendo pesadillas y viendo con frecuencia al duende que me tortura en las madrugadas, mayormente son malos ratos que, aunque solo sea joven ya me pesan mis decisiones, las cosas que nunca imaginaría que pasarían con el tiempo pasan, todo lo que está pasando es más fuerte y más grande que yo, traté de ser más rápido, me alcanza con solo dos pasos e intento ser más robusto, me derriba, utilizo mi inteligencia, pero, está a tres pasos delante de mí ,esperándome con una limonada y una sonrisa cínica.
Creo que más bajo no podría caer, a menos que descienda al último circulo del infierno, al noveno específicamente, necesito una alianza con alguien que tenga el valor de ayudar a este pobre hombre o que tenga la decencia de internarlo, en un psiquiátrico como una especie de vacaciones y así planear su estrategia y vencer todo que pasa, pasó y pasará.
Por favor, este pobre hombre pide clemencia a todo lo alto por su salud mental, necesita ayuda para vencer a sus demonios que alimenta seis veces al día, llévenselo y tráiganlo cuando esté “bien”.
Es muy raro que utilicemos la palabra bien. Ya que nadie lo está, siempre hay una gota que cae en tu cabeza haciéndote perder la cordura si no la tapas, Eso le pasó a este humilde ser. Dejó que este pequeño fluido que con el tiempo era un chorro que le aplicó tanta presión que cayó en lo más bajo donde el aire se hace tan pesado que el solo hecho de respirar duele hasta la medula.
Pido disculpas por todo lo malo que hice, Por todo lo malo que me hice trayéndome hasta donde estoy ahora con suerte en el hospital se repondrá esa persona y seguirá con su vida como si nada le hubiera pasado sin ningún nudo en la garganta.
El hospital eres tú hablando con Dios y con tu alma, si es necesario busca ayuda profesional, pero ellos, no te van a solucionar todo; antes de hacer cualquier estupidez, piensa en esa salida que te debe alguien.
